Los procesos de transformaciones sociales y tecnológicas que en el mundo subyacen a la conquista del hombre sobre los diferentes espacios naturales, convirtiéndolos en urbes de desarrollo, han venido imponiéndose como una necesidad de los pueblos en avanzar, al destacar ciertos elementos como la electrificación, industrialización, globalización, comunicaciones, autopistas que acortan distancias, y procuran el mejoramiento de la calidad de vida social.
En lo geopolítico, dentro de cada Nación en cualquier parte del globo terráqueo, se habla de Estados territoriales compuestos por ciudades capitales y pequeños poblados que conforman el campo o zonas rurales. Esta estratificación obedece al grado de desarrollo de su urbanidad, considerado en los servicios públicos: agua potable, aseo domiciliario, transporte, vías de penetración hacia las áreas productivas e instituciones educativas, entre otros.
Partiendo de esta visión acerca de la territorialidad, es necesario abordar el tema de la educación en el contexto rural y la mirada intelectiva del desarrollo endógeno sustentable como parte de la cultura de los pueblos en la pertinencia social de cubrir expectativas, avizorar nuevos conocimientos compatibles al sentido de transformación social y los requerimientos del colectivo que vive en esa zona de influencia productiva, en aras de contribuir en la acción formativa y constructiva de cada individuo.
Ahora bien, valdría la pena interrogarse sobre ¿Cuáles aspectos de la educación se adhieren a la plataforma cognitiva del desarrollo endógeno sustentable?, ¿Cómo es la situación de pertinencia social de la educación en el contexto rural facilitada a los individuos que habitan en esa zona de influencia de desarrollo?, ¿Cuáles son los ajustes que en el ámbito político bajo el enfoque de sustentabilidad educativa se toman como punto de aprovechamiento del potencial humano?
Estas consideraciones socráticas sobre la realidad del contexto educativo en la zona rural, adicionan perspectivas de reflexión sobre mis propias vivencias y circunstancias laborales compartidas en esa realidad. Sin embargo, lo que he venido haciendo debe ser sistematizado desde la percepción del otro, ante los sustentos de objetivos educacionales que hasta ahora, posiblemente, no satisfacen del todo las necesidades del colectivo en función de la mediación del docente.